≡ Alimentos consumimos casi todos los días y aumentamos el riesgo de cáncer》 Su belleza
¿Sabía que algunos alimentos que come todos los días pueden aumentar el riesgo de cáncer? Vea cuáles están aquí.
Comprender los factores de riesgo relacionados con la aparición del cáncer no es una de las tareas más agradables, especialmente cuando estos factores están relacionados con nuestra dieta.
Sin embargo, con la gran cantidad de personas que sufren esta enfermedad año tras año, debemos ser cada vez más conscientes de los alimentos que consumimos y los hábitos diarios que tenemos.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2018 el cáncer fue la segunda causa de muerte más grande en todo el mundo, y según los expertos, el aumento en el número de personas afectadas por la enfermedad está relacionado con los hábitos de vida de la sociedad actual, incluidos los alimentos. . Por lo tanto, en este artículo hablaremos sobre algunos alimentos que de acuerdo con quiénes están relacionados con el cáncer y cuyo consumo debe ser reducido o evitado por la población
Carnes procesadas y ahumadas
Las carnes procesadas y/o ahumadas generalmente contienen nitrito y nitratos, así como altos niveles de grasa. Debido a esto, quien recomienda evitar el consumo frecuente de alimentos como tocino, jamón, salchichas, salchichas, mortadela, salami, pechuga de pavo, entre otros. Esto se debe a que estos alimentos aumentan el riesgo de aparición de algunas enfermedades, como el recto, el cáncer de pulmón y de mama.
Bebidas y alimentos con azúcar agregado
El consumo de bebidas y alimentos con altas dosis de azúcar agregadas o edulcorantes artificiales, como refrescos y galletas rellenas, también están relacionadas con el cáncer. Estos tipos de alimentos tienden a conducir al aumento de peso y, en consecuencia, la obesidad, que es uno de los factores de riesgo para el desarrollo de la enfermedad.
Uno de los ejemplos más recientes fue el aspartamo, uno de los edulcorantes más utilizados en el planeta, que fue clasificado por la OMS en 2023 como posiblemente cancerígeno. La sugerencia es que el producto será reemplazado por alternativas más saludables, como la miel, el xilitol, el jarabe de agave y las frutas que son naturalmente dulces.
Alcohol
Durante décadas se ha discutido el daño del consumo de alcohol para la salud humana. Según algunos expertos, la sustancia aumenta el riesgo de estómago, hígado, páncreas, esófago y cáncer colorrectal debido al daño a los tejidos de estos órganos causados por el alto consumo de alcohol. Debido a esto, aquellos a quienes les gusta consumir algo de alcohol debería hacer esto con moderación.
Enlatado
El consumo de alimentos enlatados se desanima por quién debido al empaque de estos alimentos. En general, el embalaje enlatado está cubierto por bisfenol A, mejor conocido como BPA, un compuesto que al contactar los alimentos y ser consumido aumenta el riesgo de cambios de ADN, desequilibrios hormonales y cáncer.
Comida frita
Los alimentos fritos, además de contener altas dosis de grasa, también son responsables de aumentar el estrés oxidativo en el cuerpo, favoreciendo la aparición de inflamación, lo que, como consecuencia, aumenta los riesgos de la multiplicación de las células cancerosas.
¿Cómo tener una mejor dieta?
Tan importante como evitar el consumo excesivo de alimentos que aumentan el riesgo de desarrollo del cáncer, es optar por hábitos saludables que mejoren el funcionamiento de su cuerpo.
Por lo tanto, según los expertos, para tener una dieta saludable, es importante consumir frutas y verduras en gran parte de sus comidas diarias. Priorice la diversificación de estos alimentos y huya de una dieta monótona, por lo que busca reunir un plato colorido y variado.
Con respecto a las proteínas animales, la carne roja debe estar en el fondo, y el consumidor debe priorizar pescado, aves de corral y mariscos. En cuanto a las proteínas vegetales, los frijoles, los guisantes y las lentejas son excelentes alternativas.
El consumidor también debe optar por los alimentos ricos en fibra, como granos integrales, frutas y verduras frescas. Las nueces y las semillas son fuentes importantes de ácidos grasos de buena calidad, como Omega-3, que es un poderoso antioxidante.